El aparato digestivo es el primer mecanismo de defensa del cuerpo. El 60 o 70 por ciento del sistema inmune está en nuestros intestinos. De ahí la importancia de fortalecerlo en el presente y volverlo resiliente en el futuro.
Esta es la idea central de la ponencia de la doctora Elsa Sada, en la mesa 12 de la comunidad ‘Sanantes’.
Elsa Sada, experta en salud y bienestar, con especialidad en salud digestiva y trastornos alimentarios, y licenciada en Nutrición con maestría en la Universidad de León, España, hace una analogía del sistema inmune como un “ejército” interior que actúa a nuestro favor si le damos armas para luchar.
“Este ejército es fuerte, tiene entrenamiento; lo estás fortaleciendo, porque duermen bien, se alimentan bien, tienen luz solar, son positivos, se ríen y tienen gozo; entonces esos soldaditos te van a defender bien”.
Por el contrario, si los “soldados” del sistema inmune se encuentran heridos, deshidratados, tensos y violentados, no podrán ayudarnos a luchar contra la enfermedad.
“Ahí entra tu responsabilidad, de alimentarte bien, dormir de 7 a 8 horas, estar bien hidratado”.
Estos hábitos saludables ayudan a que las células de nuestro cuerpo se mantengan en buen estado, para poder dividirse y funcionar correctamente.
El proceso se refleja en la edad biológica contra la edad cronológica.
“He encontrado muchos pacientes de 20 años, o de 30 años, con una edad biológica de 50 años, es decir, ya tienen células envejecidas, no nutridas, con un estilo de vida no sano, que va envejeciendo las células”.
Otro aspecto clave es la microflora intestinal, como se mencionó al inicio. La doctora Elsa explica que es importante la “alta diversidad de la microflora”, en nuestro sistema digestivo.
“Si yo le hago un estudio a un africano, que no tienen tantos antibacteriales, no utilizan tantos antibióticos y medicamentos, tienen una flora muy diversa, en promedio tienen 1,700 diferentes especies, y eso los ayuda a tener un sistema inmune muy fuerte”.
En ese sentido, ¿Cómo podemos tener nuestra flora intestinal sana?
“Literalmente hay que alimentarla, con fibra, es decir, un probiótico, que es pro-vida; un prebiótico es la fibra que alimenta al probiótico, y un antibiótico, es anti-vida, entonces hay que tener cuidado con eso, claro que cuando se necesitan ahí están, pero no como se toma y se cree que no hace daño”.
Dolencias como la gastritis, colitis, inflamación, estreñimiento, falta de energía, insomnio y problemas de la piel, son indicadores de un sistema digestivo que requiere atención, ya que un estómago constantemente inflamado deriva en otras enfermedades.
“Enfermedades pulmonares, cardiovasculares, diabetes, artritis; cáncer y alzheimer ya son como la fulminación, ahí están reflejando que ya tenemos inflamación sobre nuestro cuerpo. Si yo estoy provocando una inflamación crónica, a través de lo que como y de cómo vivo, esa inflamación te lleva a las enfermedades”.
Elsa Sada concluye que la inflamación crónica ocurre por estos factores:
1.- Exceso de azúcar en la sangre.
2.- Exceso de grasas de comida chatarra.
3.- Exceso de sal.
4.- Alcohol y tabaco.
5.- Sedentarismo.
6.- Estreñimiento.
7.- Falta de nutrientes.
8.- Contaminación y sustancias tóxicas.
En el caso de Mexico, ¿Cuál es el panorama general sobre la alimentación y el sistema inmune? Para saber esto y más visita la mesa 12 de ‘Sanantes’.